Inflación

Inflación: el salario real perderá un 10% en el primer trimestre del año

La incesante inflación está dejando su huella en la capacidad de compra de la población, anticipando una nueva caída del 10% en el salario real.

La incesante carrera alcista de la inflación está dejando su huella en la capacidad de compra de la población, anticipando una nueva caída del 10% en el salario real durante los primeros tres meses del año. Este sombrío panorama se alimenta de un aumento del 25,5% registrado en diciembre, al que se suma la proyección de un incremento promedio del 20% en los precios hasta marzo, según el análisis de la consultora Ecolatina.

La incertidumbre recae en la posibilidad de que las negociaciones salariales sigan de cerca la inflación, o si la recesión, derivada de la mengua del poder adquisitivo, logrará contener el avance de los precios. En este contexto, la consultora sugiere que es probable que se dé una amalgama de ambos escenarios, con acuerdos salariales que desaceleren la inflación, aunque con costos sociales y políticos.

A diferencia de lo observado en gran parte del 2023, cuando el consumo privado se mantuvo en torno al 1% a pesar de una inflación que superó el 200%, la situación actual presenta un panorama distinto. La devaluación del tipo de cambio tras el cambio de gobierno no solo fue significativa, sino que también implicó la "liberación" de muchos precios, como la eliminación de acuerdos, ajustes en prepagas, combustibles y tarifas de servicios públicos, según Ecolatina. Todo esto, en conjunto, asegura meses de inflación de dos dígitos.

Rocío Bisang, economista de la consultora EcoGo, añade un matiz al pronóstico al afirmar que los primeros meses del año podrían presenciar una caída en el salario real, atenuada por los aumentos que se logren en las negociaciones paritarias en curso. Sin embargo, destaca la tendencia a acuerdos más breves y cláusulas gatillo ajustables por inflación en estas negociaciones.

Ecolatina prevé una combinación de negociaciones salariales bimestrales/trimestrales que busquen superar a la inflación, junto con ajustes mensuales, algunos virtualmente indexados. No obstante, advierten que estas medidas podrían no ser suficientes, y el poder adquisitivo podría perder al menos un 10% de su valor durante el verano. La consultora destaca que el efecto de la recesión y el anclaje salarial también desempeñarán un papel crucial en los próximos meses.

El pronóstico de la caída del poder de compra del salario se suma a una tendencia preocupante que abarca varios años. Según un informe del economista Nadin Argañaraz, en los últimos 72 meses, los trabajadores formales argentinos han perdido 11 salarios desde 2017, mientras que los trabajadores informales han sufrido la pérdida de 19 salarios en el mismo periodo. 

De acuerdo con estimaciones de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE), el salario mínimo, que actualmente es de $156.000, debería haber sido de más de $700.000 en diciembre pasado para satisfacer las necesidades mínimas, considerando el valor de una Canasta Básica Total para una familia tipo de $495.798,32, según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).

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