Equipos: la pelea que se puede reeditar entre Chubut y Neuquén
La reconversión de la Cuenca del Golfo San Jorge puede significar una pelea con la cuna del shale argentino por los equipos de torre.
El hallazgo reciente de gas no convencional en Chubut plantea un cambio estructural en la logística y tecnología de perforación en la Cuenca del Golfo San Jorge. Hasta ahora, la región venía operando con equipamiento más liviano y adaptado a formaciones convencionales, pero los nuevos pozos demandan una infraestructura similar a la utilizada en Vaca Muerta.
Durante años, las empresas de servicios trasladaron sus equipos más potentes a la formación neuquina, motivadas por la actividad intensa del shale. Esto dejó a Chubut con un parque de maquinaria más reducido y envejecido, insuficiente para afrontar perforaciones de alta complejidad. Sin embargo, la situación actual obliga a rediseñar esa estrategia.
El desarrollo de pozos horizontales con tramos verticales y laterales de hasta 3.000 metros cada uno requiere una nueva generación de equipos. Las torres que se utilizan en Vaca Muerta, con motores de 1.500 HP y capacidad de trabajo en trípode, marcan la pauta de lo que se necesitará en el corto plazo en Chubut.
Actualmente, en la cuenca no hay disponibilidad de este tipo de maquinaria. Esta limitación técnica se convierte en uno de los principales factores que condicionan el ritmo de ejecución del piloto no convencional. La planificación del proyecto debe tener en cuenta tanto la disponibilidad como la logística de traslado de los equipos.
En este contexto, el Gobierno provincial reconoce que si se avanza con mayor profundidad o se multiplica el uso de pozos horizontales, será indispensable incorporar tecnología de mayor porte. Aunque no hay un "robo" de equipos hacia Vaca Muerta, como algunos sugirieron, lo cierto es que los equipos más modernos están concentrados en Neuquén.
Una ventana de oportunidad para modernizar
La coyuntura actual presenta, no obstante, una oportunidad. El alivio en las restricciones para importar bienes de capital desde el exterior abre la posibilidad de incorporar maquinaria más eficiente sin depender exclusivamente del mercado interno. Algunas compañías ya están avanzando en ese sentido y planean traer nuevas torres durante este año.
Además de la disponibilidad, otro aspecto clave es la eficiencia operativa. Muchos de los equipos actuales en Chubut han sido reconvertidos, y aunque siguen cumpliendo funciones básicas, no logran igualar la productividad ni los estándares de seguridad de los equipos de nueva generación. Esto impacta en los tiempos de perforación y, por ende, en los costos totales de cada pozo.
En ese marco, las decisiones de inversión deberán contemplar no solo la cantidad de equipos necesarios, sino también su tecnología, velocidad de ejecución y nivel de automatización. Equipos más modernos permiten completar las tareas de perforación con mayor rapidez, lo que se traduce en menor exposición al riesgo, menor costo operativo y mejor rendimiento económico del pozo.
Logística compartida y coordinación regional
Una de las alternativas que se analiza para reducir costos es coordinar el uso de equipos entre provincias productoras. Por ejemplo, se evalúa aprovechar ventanas de disponibilidad en Neuquén o movilizar maquinaria que se utilice temporalmente en proyectos de exploración como los de Palermo Aike, en Santa Cruz. Esto permitiría optimizar el uso de recursos sin necesidad de comprar o importar cada unidad requerida.
En la fase piloto, este enfoque colaborativo puede marcar la diferencia en términos de viabilidad económica. Si el resultado es positivo, el paso siguiente será planificar un esquema de desarrollo masivo, lo que implicará una presencia constante de equipos de alta gama en la región.
Chubut ingresa así en una etapa de transición, donde la infraestructura debe adaptarse a una realidad más compleja y exigente. El camino hacia el gas no convencional en la Cuenca del Golfo San Jorge no solo dependerá del potencial geológico, sino también de la capacidad de modernización tecnológica y de planificación logística del ecosistema energético local.







