Atropelló a un niño que jugaba en un trampolín y terminó incrustado en el techo de un granero
El conductor iba con su familia a gran velocidad cuando perdió el control del vehículo. Siete personas resultaron heridas, dos de gravedad.
Un accidente tuvo lugar en la ciudad de Bohmte, Alemania, cuando un conductor de 42 años perdió el control de su vehículo, atropelló a un niño de 7 años que jugaba en una cama elástica y terminó incrustado en el techo de un granero, a tres metros de altura.
El hecho ocurrió el sábado por la noche y dejó un saldo de siete heridos, entre ellos, el propio automovilista, su esposa de 43 años, sus dos hijos y un adolescente amigo de la familia.
El niño atropellado y la mujer fueron los más afectados, con lesiones de gravedad. Según informaron fuentes policiales, el auto -un Volvo SUV- se desvió tras chocar con otro vehículo estacionado, irrumpió en el jardín de una casa y se catapultó contra el edificio.
"La operación fue muy inusual", señalaron desde el cuerpo de bomberos. El rescate demandó el uso de grúas especializadas y la intervención del Automóvil Club Alemán. La policía investiga el hecho, aunque ya descartó que el conductor estuviera alcoholizado.
La madre del menor herido expresó su conmoción: "¿Qué tan rápido debió haber sido?".
Fuente: TN







