Elecciones en Chile: análisis del triunfo de Kast y el voto marcado por el miedo y la desafección política
La politóloga Lucía Miranda analizó en ABC Radio las claves del contundente triunfo de José Antonio Kast en Chile y advirtió sobre un electorado atravesado por la desafección política, el voto obligatorio y un clima social dominado por el miedo, la inseguridad y la incertidumbre postpandémica.
En diálogo con ABC Radio, la politóloga Lucía Miranda, doctora en Estudios Latinoamericanos, investigadora del Centro de Investigaciones en Ciencias Sociales y Juventud de la Facultad de Ciencias Sociales, Jurídicas y Económicas de la Universidad Católica Silva Henríquez y docente de FLACSO Chile, brindó un análisis profundo sobre los resultados del balotaje presidencial chileno que consagró a José Antonio Kast con una diferencia amplia.
Miranda explicó que el resultado no puede analizarse sin tener en cuenta las transformaciones políticas y sociales que atravesó Chile en los últimos años. Recordó el estallido social previo a la pandemia, cuando amplios sectores de la ciudadanía reclamaron mayor cobertura de derechos, en un país donde la educación y la salud han estado históricamente atravesadas por la lógica privada.
Tras ese proceso, se sucedieron intentos fallidos de reforma constitucional y un período de reformas parciales durante el gobierno de Gabriel Boric, que incluyeron cambios en el sistema de salud pública. Sin embargo, la politóloga remarcó que estas elecciones fueron las primeras presidenciales con voto obligatorio, luego de años de fuerte caída en la participación electoral.
"En 2017 votó menos del 50% de la ciudadanía. Hoy estamos hablando de un electorado que antes no participaba y que ahora vota obligado, con multas muy altas", explicó Miranda, y advirtió que se trata de un sector con bajo nivel de politización y sin educación cívica, lo que impacta directamente en la forma en que se procesan las propuestas políticas.
En ese contexto, sostuvo que el voto estuvo menos guiado por programas y más por emociones, principalmente el miedo. "Hay una pérdida de centralidad de lo político. La información se procesa sin herramientas críticas, en un escenario donde los medios ponen el foco en delitos, portonazos, narcotráfico, aun cuando los niveles de criminalidad en Chile siguen siendo bajos en términos comparativos", señaló.
La politóloga comparó este fenómeno con lo que ocurre en otros países de la región, incluida Argentina, donde las noticias sensacionalistas y el clima de inseguridad influyen de manera decisiva en la percepción social. "Después de la pandemia, las sociedades quedaron atravesadas por el miedo y la incertidumbre, y eso se traduce en decisiones electorales emocionales", indicó.
Consultada sobre el perfil ideológico de Kast y la aparente contradicción entre su discurso -que reivindica aspectos del pinochetismo- y el proceso social iniciado tras el estallido, Miranda explicó que la desafección política es tan profunda que incluso información ampliamente difundida pierde peso a la hora de votar.
Respecto a los posibles alineamientos regionales y el vínculo con el gobierno argentino, la politóloga evitó especulaciones en materia de política exterior, aunque advirtió sobre un estilo de liderazgo presidencial fuerte, con uso intensivo de decretos y vetos. "Chile y Argentina son sistemas hiperpresidencialistas, lo que facilita formas de ejercicio del poder más autoritarias", señaló.
Finalmente, Miranda aportó datos preliminares sobre el perfil del electorado que apoyó a Kast: mayor respaldo en sectores de menores recursos, con menor nivel educativo, presencia en algunas comunas de alto poder adquisitivo y un apoyo significativo de grupos vinculados a iglesias evangélicas.
El análisis dejó en evidencia un escenario regional marcado por la crisis de representación, la fragilidad de la cultura cívica y el avance de liderazgos que capitalizan el miedo y la incertidumbre social en América Latina.







