El juicio por el femicidio de Cecilia Strzyzowski tuvo una única absuelta, ¿quién es y por qué quedó en libertad?

En el veredicto del juicio por jurado que investiga el feminicidio de Cecilia Strzyzowski, hubo una sola persona absuelta: Griselda Lucía Reinoso, acusada de encubrimiento. Su defensa logró que la jueza dictara su inmediata libertad, una decisión que hoy tiene un fuerte impacto mediático y social.

El jurado popular declaró culpables a seis de los siete acusados en la causa. César Sena, ex pareja de Cecilia, fue condenado por homicidio doblemente agravado (por vínculo y violencia de género). 

Sus padres, Emerenciano Sena y Marcela Acuña, también resultaron culpables como partícipes primarios en el femicidio. En cuanto a los colaboradores: Gustavo Obregón y Fabiana González fueron hallados responsables por encubrimiento agravado; Gustavo Melgarejo, por encubrimiento simple.

La única absuelta fue Griselda Reinoso, a quien el tribunal declaró "no culpable" debido a que, según el jurado, no había pruebas suficientes para vincularla con las maniobras de encubrimiento. Inmediatamente después del fallo, se ordenó su libertad.

 En el inicio de su declaración, Reinoso afirmó: "Lo único que digo es que soy inocente de todo lo que se me acusa". Durante su exposición, respondió preguntas sobre sus actividades el 2 de junio de 2023, fecha en la que desapareció Cecilia. Aseguró que a las 17hs estaba en la casa de un vecino: "Preparábamos la cena y tomamos cerveza y vino con mi exesposo Melgarejo, mi hija y mi nieta". Señaló que solo salió una vez del lugar para atender un kiosco ubicado dentro del mismo terreno y aseguró: "No vi nada. No vi ningún fuego encendido". Permaneció allí hasta medianoche.

Afirmó que tomó conocimiento de la causa el 11 de junio, cuando fue buscada por la Policía en la casa de su padre. Dijo que inicialmente fue notificada por una exposición de violencia de género y luego trasladada a Fiscalía, donde quedó detenida.

 La defensa de Reinoso había planteado su absolución aun antes de que terminara el juicio, argumentando falta de elementos concretos que la vincularan directamente con ocultación activa del crimen. 

El cuerpo de Cecilia nunca fue encontrado. Según peritajes, se cree que sus restos pudieron haber sido quemados en un terreno familiar del clan Sena, alcanzando temperaturas de más de 800 °C.