Le dieron salidas transitorias a Pablo Amín: condenado a perpetua por matar y mutilar a su pareja

Una resolución judicial ha generado fuerte controversia en la provincia de Tucumán: Pablo Maximiliano Amín, el hombre condenado a prisión perpetua por el salvaje femicidio de su pareja, María Marta Arias, obtuvo el régimen de salidas transitorias. La decisión le permite al recluso, conocido como "El Loco" y alojado en el penal de Villa Urquiza, salir bajo custodia judicial dos veces al mes por un lapso de tres horas por salida.

El crimen que conmocionó al país ocurrió en octubre de 2007. Amín, experto en artes marciales, estranguló a María Marta Arias, de 23 años, con quien se había casado meses antes. Lo más espeluznante del caso, por lo que fue condenado en 2009, fue el ultraje y la mutilación posterior al homicidio, al punto de arrastrar el cuerpo de la víctima por los pasillos del hotel Catalinas Park.

La medida fue adoptada por la jueza de Ejecución Penal y ratificada por el Tribunal de Impugnación, a pesar de la oposición expresa del Ministerio Público Fiscal (MPF).

La resolución judicial se fundamenta en la Ley de Ejecución Penal, que establece que los reclusos pueden acceder a estos beneficios tras cumplir con un determinado tiempo de encierro, demostrar buena conducta y cumplir con los requisitos formales de la normativa vigente. Amín ha cumplido ya 18 años de prisión y, según informes, ha contraído matrimonio civil y religioso con una mujer que conoció durante su reclusión en el pabellón de máxima seguridad.

El brutal crimen de 2007

El expediente judicial detalla la brutalidad del ataque. La pareja, oriunda de Santiago del Estero, se encontraba en Tucumán por un congreso y se alojaba en la habitación 514 del hotel. Testigos relataron que Amín ya había manifestado comportamientos erráticos, paranoia y un presunto "brote psicótico" el día del crimen, llegando a ser asistido por la policía tras declarar: "Ella ya no me quiere. Me quiere alejar de todos."

Sin embargo, el brutal ataque ocurrió tras la cena, cuando la pareja regresó a la habitación. Amín atacó a Arias mientras dormía, estrangulándola con sus manos. El nivel de ensañamiento continuó post mortem: le extrajo los ojos y lesionó gravemente sus zonas íntimas antes de arrastrar el cuerpo por las escaleras. Cuando fue detenido por la Policía, declaró: "No se preocupen, estoy en estado de emoción violenta", aunque la investigación judicial determinó su autoría material y lo condenó a prisión perpetua.

A pesar de que el condenado sostuvo: "Mientras estaba acostado me puse sobre ella y comencé a apretarle el cuello con las manos con todas mis fuerzas", los motivos exactos del asesinato, que incluyeron hipótesis de supuestas fotografías de la víctima no comprobadas, nunca quedaron fehacientemente esclarecidos durante el juicio.