A 255 años del nacimiento de Manuel Belgrano, advierten por el cierre del Instituto que preserva su legado
Un referente del Instituto Belgraniano criticó con dureza la decisión del gobierno nacional de disolver los institutos históricos. "Esto no implica ahorro, son monedas. Es como si uno tuviera que hacer un ahorro en su casa y le saca la comida al loro", expresó.
En el día del 255° aniversario del nacimiento de Manuel Belgrano, un referente del Instituto Belgraniano dialogó con ABC Radio y cuestionó la disolución del organismo junto a otros institutos históricos. "Disolvieron el Instituto Nacional Belgraniano. Estamos hablando de uno de los padres de la patria", remarcó, y lamentó que la medida se haya aplicado sobre estructuras con escaso gasto estatal: "No le correspondía, sobre todo a institutos que no tienen ningún gasto para el Estado, mínimamente tres o cuatro empleados que son monotributistas, encima, o sea, con sueldos muy bajos".
Consultado sobre el rol del Instituto, respondió que brindaban asesoramiento "con muchísimas cosas" y calificó la decisión como "un acto de imprudencia". Sobre el argumento oficial de que las funciones serían reemplazadas por la escuela pública, expresó: "Eso no es así, porque no existe la materia Historia en ninguna escuela estatal. Existe Ciencias Sociales, y se puede dar Historia 15 minutos una vez por semana y un año de lo que es la historialidad de 12 años".
También cuestionó el sentido económico de la disolución: "El presupuesto va a seguir siendo el mismo, el gasto presupuestado se va a gastar, o sea que esto no implica nada. Son monedas. Es lo mismo que si uno tiene que hacer un ahorro en su casa y le saca la comida al loro. No es el gasto grande el que tienen que recortar".
El entrevistado remarcó la importancia del Instituto y su austeridad histórica: "La historia necesita más, sin duda. Hemos sido durante toda la vida muy austeros. Nunca tuvimos años de esplendor económico en la Argentina. Siempre hemos sido austeros con el ejemplo de Belgrano en los gastos".
Finalmente, al ser consultado sobre qué diría Manuel Belgrano ante esta situación, el entrevistado fue contundente: "Sí, sin ninguna duda: diría ‘¡ay, patria mía!', como dijo días antes de su muerte a un amigo que le decía que estaba pensando en la eternidad a dónde iba y en la patria querida que dejaba. Pero también pensaba que los buenos ciudadanos iban a remediar los malos. Así que algún día dejemos buenos ciudadanos que nos gobiernen para remediar los malos que tiene nuestra patria".