Eduardo Valdés: "El Papa Francisco fue el pontífice de la humanidad, un constructor de puentes"
El diputado nacional reflexionó sobre el legado universal de Francisco, el impacto de su muerte en el mundo y la continuidad de sus reformas dentro de la Iglesia Católica.
En diálogo con ABC Radio, Eduardo Valdés destacó la figura del Papa Francisco como un líder que trascendió credos, ideologías y divisiones. Recordó su histórico enfrentamiento con Barack Obama por la paz en Siria, valoró la capacidad de Francisco para integrar a todos y expresó su convicción de que no habrá retrocesos en las reformas impulsadas por el pontífice. Además, consideró marginal la actitud del presidente Milei durante las exequias.
Sobre el legado de Francisco:
Valdés consideró que recién ahora, tras su fallecimiento, muchas personas comenzarán a descubrir y valorar verdaderamente el legado del Papa. "Lo lloran ateos, católicos, pañuelos verdes y pañuelos celestes. Ha logrado un afecto plural. Fue más que el Papa de los católicos; fue el pontífice de la humanidad, un constructor de puentes y destructor de muros", afirmó.
Actitud de Javier Milei en el funeral:
Consultado sobre la polémica llegada tarde del presidente Javier Milei al funeral, Valdés prefirió minimizar el tema: "Es marginal, no vale la pena detenerse en eso cuando hay algo tan grande que nos une como el legado del Papa". Sin embargo, recordó que Milei priorizó su asistencia a un evento ligado a Venegas Lynch, quien había sugerido públicamente romper relaciones con el Vaticano.
El recuerdo del vínculo con Barack Obama:
El diputado destacó especialmente el respeto demostrado por Barack Obama en su despedida a Francisco. "Fueron adversarios públicos cuando el Papa se opuso a la invasión de Siria, convocando a una Jornada Mundial de Oración que movilizó a cristianos, judíos y musulmanes. A partir de ese gesto, Obama desistió de la invasión y luego pidió ayuda a Francisco para normalizar las relaciones entre EE.UU. y Cuba. Eso muestra la estatura moral de Francisco", resaltó Valdés.
La continuidad en la Iglesia:
Sobre el futuro de la Iglesia tras el cónclave, Valdés fue optimista: "No creo que haya espacio para retrocesos. Francisco dejó la vara muy alta. Cuando asumió, la Iglesia estaba divorciada de la sociedad; hoy la devuelve abrazada por la humanidad, con multitudes de jóvenes en el Vaticano. Si hay jóvenes, hay futuro".
Recuerdo de una situación pasada:
Antes de despedirse, el conductor recordó la agresión con gas pimienta que sufrió Valdés en una manifestación de jubilados, un hecho que había sido duramente criticado en su momento por el propio Papa Francisco. "Lo increíble es que quien tiró los gases también fue a despedir al Papa", mencionó Valdés, aunque cerró con un mensaje conciliador: "Hoy nos propusimos unirnos, no pelearnos".