Jornada histórica en Inicial: 34 instituciones se unieron para celebrar a las infancias y reflexionar sobre derechos
Por primera vez en la ciudad, 34 instituciones de gestión pública y privada del nivel inicial llevaron adelante una jornada conjunta para revalorizar la educación de los más pequeños, coincidiendo con el Día del Estudiante y poniendo en el centro la temática de los derechos de las niñeces.
La propuesta surgió desde el Jardín N°403, y rápidamente encontró eco en directoras y docentes de otros jardines que venían con la idea de organizar una celebración de este tipo. La respuesta superó las expectativas: participaron alrededor de 1.200 niños en el turno mañana y se esperan unos 1.800 en el turno tarde.
"Estamos felices y esperemos que siga, que perdure y continúe a lo largo del tiempo. La respuesta fue mucho más de lo que esperábamos", expresó Marcela Funes, directora del Jardín 403 y una de las organizadoras.
La concentración de la mañana se realizó en la plaza España, con un desfile que reunió a miles de niños acompañados por sus familias y docentes. Para el turno tarde, la convocatoria fue a las 14 horas en Mitre y Rivadavia, iniciando el desfile cerca de las 14:30.
El cierre de la jornada incluyó un show pensado especialmente para los más pequeños sobre la calle San Martín, donde se instaló el escenario. Desde allí, cada institución se desconcentró para regresar a sus jardines.
Previo al evento, todas las instituciones trabajaron con talleres y actividades de reflexión junto a los niños y sus familias, abordando el tema de los derechos y las obligaciones que también competen a los adultos.
"Es una temática muy importante, el derecho de las niñeces es algo que el Ministerio está proponiendo trabajar y todas las instituciones venimos desarrollando actividades en forma simultánea", destacó Funes.
La actividad marcó un hito en el nivel inicial, que hasta ahora no había tenido un encuentro masivo de esta magnitud. "Era algo que estaba pendiente; había directoras con ganas de hacer algo así y no se había podido concretar. Nosotros pensamos que era un buen momento para hacerlo y se sumaron un montón", agregó la organizadora.
Con una participación multitudinaria y una fuerte impronta comunitaria, el evento dejó abierta la puerta para que la experiencia se repita y se convierta en una tradición educativa y social en los próximos años.