Nuevo hito en la búsqueda de desaparecidos: Confirman restos óseos en un campo militar de Córdoba

El Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) confirmó hoy el hallazgo de restos óseos en un terreno de la Guarnición Militar de La Calera, en la provincia de Córdoba. El descubrimiento se produjo en el marco de las exhaustivas tareas de prospección y excavación arqueológica ordenadas por el Juzgado Federal N° 3 de Córdoba, en la búsqueda de posibles enterramientos clandestinos relacionados con el tristemente célebre ex Centro Clandestino de Detención (CCD) "La Perla".

El CCD "La Perla" funcionó entre 1976 y 1978 en terrenos pertenecientes al Tercer Cuerpo de Ejército. Se estima que entre 2.000 y 2.500 personas pasaron por este centro, y gran parte de ellas continúan desaparecidas.

Próximos Pasos: Análisis y Antigüedad

Los restos óseos encontrados serán analizados minuciosamente para determinar su antigüedad. El objetivo principal es establecer si pertenecen a personas detenidas y desaparecidas durante la última dictadura cívico militar que hayan sido víctimas de los crímenes cometidos en "La Perla".

Las tareas de campo se llevaron a cabo gracias a un convenio de cooperación entre el Servicio de Antropología Forense del Instituto de Medicina Forense del Poder Judicial de Córdoba, el EAAF y el Departamento de Geología de la Universidad Nacional de Río Cuarto.

El Largo Camino de la Búsqueda Forense

El EAAF ha trabajado en la búsqueda de posibles enterramientos clandestinos en la Guarnición Militar de La Calera durante aproximadamente 20 años. Inicialmente, las excavaciones se basaron en testimonios de sobrevivientes y análisis de fotografías satelitales de los años 1976 y 1978, centrando el interés en áreas como Loma del Torito y los potreros El Triángulo y El Durazno.

En los últimos años, el equipo incorporó el uso de tecnología LiDAR (detección y medición de distancias con luz láser) y, más recientemente, el análisis de fotografías aéreas de 1979 provistas por el Catastro de la Municipalidad de Córdoba, las imágenes temporalmente más cercanas a los eventos investigados.

Este exhaustivo trabajo permitió identificar y delimitar dos terrenos de gran interés: una primera área de una hectárea y una segunda de diez hectáreas, ambas con evidencia de actividad humana antrópica en una escala y temporalidad que se vinculan con la hipótesis de exhumaciones de cuerpos con maquinaria que habrían generado grandes movimientos de tierra a finales de la dictadura.

La confirmación del hallazgo óseo representa un avance crucial en la búsqueda de la verdad y la identificación de las víctimas.

En el anuncio oficial del hallazgo estuvieron presentes el juez federal Miguel Hugo Vaca Narvaja y el secretario Juan Miguel Ceballos del Juzgado Federal N° 3; el auxiliar fiscal Facundo Trotta de la Unidad Fiscal de Derechos Humanos; integrantes del EAAF y del Instituto de Medicina Forense de Córdoba; y abogados representantes de las querellas particulares.