Sin ningún chapulín
Análisis de Saúl Gherscovici.
Por mayoría, sin discusión ni análisis y con varias trampas y artimañas, el gobierno nacional dará media sanción hoy en Diputados al proyecto presupuestario 2026. Será la primera vez, en el tercer año de gestión, que el gobierno de Milei tendrá presupuesto. Hasta la fecha, y al no poder contar con los números que mejor se adapten a su plan de ajuste, decidió manejarse sin la herramienta fundamental que guía y regula a toda administración.
El presupuesto 2026 no solo no contiene obra pública, también continúa con el recorte sobre Educación, Salud, Ciencia, etc. Los números son presentados como un avance comparándolos con los del 2023 pero, en la práctica y en función de la inflación y la falta de actualización presupuestaria, implican menos fondos para la cobertura de los derechos que tienen los habitantes de la República Argentina y los servicios que, en función de ellos y de su obligación, debe brindar y garantizar el Estado nacional.
En el dictamen aprobado la única obra pública que se asignó a Chubut es la reparación de la ruta 3, "Tramo EA, Laguna Grande, entre Comodoro y Río Chico, con un presupuesto de 1535 millones de pesos que, en la práctica y a través de los acuerdos de cancelación de deudas entre los gobiernos de Javier Milei y el gobernador Ignacio Torres, podrían ser absorbidos por el alicaído tesoro chubutense. El resto de las obras necesarias y reclamadas siguen durmiendo el sueño de los justos y esta vez ni siquiera fueron incluidos como expresión de deseos.
La única realidad es la que yo veo y quiero
Pero lo convalidado por la mayoría de la comisión incluye algo aún más grave que la ausencia de obra y la continuidad de los recortes presupuestarios a los servicios esenciales. Dentro del texto que hoy se pondrá a votación, La Libertad Avanza incluyó la eliminación de las leyes de emergencia en Discapacidad y del Fondo de Financiamiento Universitario, esas que tanto costó al Parlamento anterior aprobar luego y a la par de los reclamos y movilizaciones en las calles.
Pese a la naturaleza y las fuerzas de esas leyes, y luego de que fracasara el veto que el presidente aplicó sobre ambas, el gobierno de Javier Milei las desobedeció. Lo mismo hizo con las advertencias judiciales sobre la relativa a las personas con discapacidad. Ahora, con la nueva mayoría, La Libertad Avanza directa e ilegalmente borra esas leyes para atender necesidades y derechos que tanto le molestaban porque iban en contra de su política de gestión de un gobierno empecinado en solo ver y contar lo que le agrada, ignorando por completo el resto. En definitiva, en lugar de aceptar que "la única verdad es la realidad", Milei y los suyos siguen adelante con "la única verdad es la que yo veo, te cuento y dibujo".
En el Senado de la Nación, pese a que no corresponde que allí se trate, avanza también la discusión sobre la reforma laboral y la modificación a la Ley de Glaciares que, Patricia Bullrich, mediante podría aprobarse el viernes 26, luego de los brindis navideños y el sopor en que el pueblo queda para estas fechas en las que, históricamente, solo importa festejar y que hoy se transformaron en un sentimiento que se traduce en algo así como "terminar con el año a cómo de lugar, y después vemos que hacemos el 2026".
Sin el chapulín
Cuando en El chavo del 8, el o la protagonista estaba atrapada en una realidad adversa, de la que realmente no veía como se podía salir, miraba a cámara y se preguntaba "¿Y ahora quien podrá defendernos'". Inmediatamente, provocando siempre algún desarreglo de escenografía aparecía el Chapulín colorado que, pese a su torpeza, terminaba resolviendo el problema y alejando de la víctima al problema y su responsable.
A partir del resultado de las elecciones del 26 de octubre, en el Congreso ya no tendremos esa torpe pero empecinada mayoría que se conformaba a partir de Unión por la Patria. Por eso eran tan importantes y trascendentes las pasadas elecciones intermedias. Ahora los diputados y senadores de la oposición tendrán que trabajar mucho más para demostrar los errores y verdaderas intenciones que encierran y esconden la mayoría de las propuestas del gobierno que, para variar, disfrazan con palabras encantadoras. El último ejemplo es lo que hizo con su propuesta de "modernización laboral" que, en el texto y en la práctica si el mismo se convierte en ley, se plantea volver al siglo XIX, cuando los trabajadores no tenían derecho alguno.
Durante estos dos años de gestión, Milei avanzó prácticamente como quiso e ignorando las distintas advertencias y barreras que le puso el Congreso. En esta nueva etapa será fundamental el ingenio y trabajo legislativo, sino también que el mismo sea acompañado y empujado por la gente en las calles, reclamando por sus derechos para que el gobierno, que debería ser de todos y no solo de "los argentinos de bien", entiendan las verdaderas consecuencias de su plan de ajuste que sigue avanzando, pese a que cada vez queda menos para ajustar en la mayoría de las casas de los y las argentinas.