Un plan cruel para favorecer los 3%

 El escándalo de los audios del ex titular de la Agencia Nacional de Discapacidad, Diego Spagnuolo, reflejó con claridad cómo las medidas de ajuste forman parte de un esquema y plan de gobierno que es ideológica e intrínsicamente cruel y corrupto.

El teórico "ahorro" por la baja de pensiones, que para variar se hizo de manera generalizada y poniendo en más situación de vulnerabilidad a las personas con discapacidad, iba de la mano del desproporcional aumento en la compra de medicamentos para favorecer y acrecentar un retorno, el famoso 3% que todavía no se sabe si era para los Menem o para ellos y Karina.

En los audios, Spagnuolo no solo habla del 3 % y de que el presidente Milei sabía de su existencia y cobro. También describe el esquema que se ideó para dar de baja a pensiones para poder exhibir, vía Adorni, "como el populismo K inventó discapacitados planeros para vivir con la nuestra".

Hoy con todo el dolor y daño que ocasionó ese acto de crueldad, miles de personas con discapacidad hacen fila frente a la oficina de ANDIS, con sus sillas de rueda, muletas y otras dificultades que vencen a diario, para justificar lo que está a la vista y que podría haberse verificado sin tanta crueldad y humillación.

Recordemos que el mismo sistema se implementó en Comodoro y resto de las ciudades donde las personas con discapacidad, si es que les llegó la comunicación, tenían que acercarse a demostrar su situación y así ser "merecedores" de una pensión que, al igual que la jubilación mínima, ronda los 270 mil pesos, con los que ahora (al igual que los jubilados) tienen que comprar los medicamentos, que antes el Estado les daba.

Toda esta situación es la que motivó que con mucho esfuerzo, por las trabas que pusieron los legisladores del gobierno y sus aliados, se declare la emergencia en discapacidad. Esa que vetó el presidente Javier Milei, que ya adelantó que judicializará el rechazo del mismo si el Senado convalida lo resuelto en Diputados

El gobierno acusó el golpe de la denuncia involuntaria de Spagnuolo, que salvo que se transforme en arrepentido afrontará las mismas consecuencias judiciales de sus actos de corrupción. En lugar de aclarar, Milei siguió con su desgastada receta de acusar de todo al kirchnerismo, ese que dice que dejó de existir pero que revive cada vez que le explota un problema de mala gestión o por las consecuencias que genera su plan económico.

Los cálculos indican que, en estos meses de funcionamiento del 3%, se recaudaron 10 millones de dólares con los que, entre otras cosas, se podrían haber comprado 44.500 sillas de ruedas, pagado más de 270.000 horas de acompañamiento terapéutico y/o 50.000 pensiones. Se trata de una clara demostración de cuáles son los efectos y daños de un plan que está diseñado para enriquecer a unos pocos a partir del dolor y la miseria que se ocasiona e impone a la gran mayoría.