Rompió el silencio la hija no reconocida de la Mona Jiménez tras ganar el juicio: "Sufrí un montón"
Natalia Romina Jiménez Rufino recibirá más de $92 millones tras una sentencia que reconoce daño moral y patrimonial por la falta de vínculo paterno durante años
La Mona Jiménez, se encuentra en el centro de una fuerte disputa familiar que ha culminado en una histórica resolución judicial: deberá indemnizar a su hija, Natalia Romina Jiménez Rufino, con una suma millonaria por los años de ausencia paterna.
La jueza de Primera Instancia María Virginia Arato determinó que Juan Carlos Jiménez Rufino (nombre real del artista) debe pagar $92.213.040, que incluyen $40.314.000 por daño moral y $51.899.040 por daño patrimonial por pérdida de chance pasada, más sus intereses.
Natalia Jiménez, de 43 años, se refirió al fallo en una entrevista en televisión: "Estoy mejor, más tranquila, procesando la situación, porque es el fallo de una jueza donde se dice toda la verdad. O sea, estamos hablando de la palabra suprema, que es la de un juez. Y frente a eso, se dice que yo siempre dije la verdad, lo que yo contaba".
La ahora reconocida hija del "Mandamás" relató el profundo sufrimiento que atravesó: "Sufrí un montón. Pero más allá de eso, todo ese sufrimiento llegó a su fin". También denunció la hostilidad y el negacionismo por parte de la familia paterna: "Ellos me niegan. Me niegan desde el primer momento, desde el momento cero. Porque para ellos son únicos. Dicen que yo soy extramatrimonial, que mi mamá lo conoció en un burdel, como dijo hace años en Intrusos".
La distancia y la falta de vínculo quedaron patentes con comentarios de otros miembros del clan Jiménez. Lorena Jiménez, otra de las hijas del cuartetero, afirmó: "Para mí, ella es una extraña".
Natalia recordó cómo se enteró, a los ocho años, de que La Mona era su padre biológico: "Me enteré por mi abuela. Ahí anulé un montón de cosas, pero igual surgieron. Mi familia discutió y se distanció".
A pesar de que él la había reconocido, la relación no prosperó en ese momento. "Yo tenía a mi papá, que me crió con amor, y no estábamos tan expuestos como ellos. Continué con mi vida" indicó.






