Energía Chubut: Un evento que dejó poco para la región

Pasó una semana de Energía Chubut 2050, un evento que se anunció con demasiadas expectativas. No trajo anuncios de inversión, pero sí confirmó el retiro de YPF. Minería, marketing político y un escenario pensado para un año electoral.

"Dios está en todos lados, pero atiende en Buenos Aires". La frase resume con precisión lo que fue el evento Energía Chubut 2050, organizado por el Gobierno provincial en uno de los hoteles más exclusivos del país. La consigna era mostrar el potencial energético de Chubut y atraer inversiones para volver a ser una provincia pujante. Sin embargo, el encuentro terminó con un único resultado concreto: Marín confirmó -diríamos con alegría- que YPF venderá Manantiales Behr, su último activo en la Cuenca del Golfo San Jorge.

Horacio Marín, presidente y CEO de YPF, agradeció al Gobierno de Chubut, al municipio de Comodoro Rivadavia y a los gremios por facilitar "el retiro" de la empresa, y aseguró que la salida abrirá nuevas oportunidades. Una despedida elegante, pero tajante.

La mala noticia de la salida definitiva de YPF se había intentado ocultar por todos los medios. Una semana antes del aniversario de Comodoro Rivadavia el 23 de febrero -la ciudad que vio nacer a YPF-, el ministro de Hidrocarburos, Federico Ponce, y el secretario general del Sindicato de Petroleros Privados, Jorge Ávila, insistían en que YPF no se iba. Pero la negación no alcanzó.

Desde Estados Unidos, Marín fue claro: a partir de 2026, la petrolera se enfocará 100% en proyectos no convencionales. A pesar de eso, en Fontana 50 seguían repitiendo que YPF continuaría en la Cuenca. Finalmente, el anuncio oficial llegó durante un evento pensado para seducir a inversores y terminó siendo un nuevo cachetazo para la administración de Ignacio Torres.

Un ninguneo a Comodoro

El Valle ha envidiado históricamente a Comodoro. La llegada de Ignacio Torres al poder expuso que el triángulo conformado por Trelew, Puerto Madryn y Rawson busca desplazar a la capital nacional del petróleo como polo de inversiones.

El nuevo desprecio a Comodoro vino con una "propuesta" para construir una planta de GNL en el puerto de Rawson. ¿Qué ventajas ofrece ese puerto frente al de Comodoro? ¿Por qué transportar gas desde la Cuenca a otro punto de la costa? Nadie lo explicó.

El Gobierno provincial dejó en claro que apoyará cualquier alternativa, incluso si perjudica a Comodoro. ¿Y la posición del municipio? Un misterio. Pero si no hubo quejas cuando el anuncio más importante del sector hidrocarburífero en los últimos 15 años se hizo en Trelew, cualquier reacción posterior será irrelevante. Hoy, Trelew, Madryn y Rawson quieren todo: hidrógeno, hidrocarburos y minería.

Una puerta abierta a la minería

El evento también dejó claro que la explotación de uranio ya no es tabú. Aunque Fontana 50 aseguraba que no estaba en agenda, la minería pasó de ser "el tema prohibido" a la excusa perfecta para reunir empresarios y políticos en pleno centro porteño. Todos celebraron el giro discursivo del gobernador, que permitió alinear a Chubut con Nación en una misma dirección.

Torres intenta marcar distancia de La Libertad Avanza, pero en los hechos respira el mismo aire que la Casa Rosada y comparte la visión de muchos funcionarios que merodean el Sillón de Rivadavia. Los trascendidos indican que después de las elecciones de medio término, los proyectos de uranio podrían hacerse realidad.

El gobernador sabe que la minería es una bomba de tiempo si no hay consenso social. El antecedente del gobierno de Mariano Arcioni lo demuestra, y Torres lo tiene presente: varios exfuncionarios del "Grupo del Liceo" forman parte de su equipo.

Ninguna inversión en el horizonte

En Energía Chubut no hubo ningún anuncio de inversiones concretas. En hidrógeno y minería, los proyectos requieren al menos una década para generar producción. En energías renovables, Aluar y Genneia fueron claros: sin una nueva línea de alta tensión, no se puede ampliar la capacidad instalada. Sin redes de transmisión, no habrá más parques eólicos.

En hidrocarburos tampoco hubo sorpresas. Se difundieron algunos detalles sobre exploración no convencional, pero las novedades de PECOM no alcanzaron para entusiasmar. La empresa del Grupo Pérez Companc debutó con despidos y críticas de la Cámara Empresarial de la Cuenca.

Crown Point mostró sus planes para la región, pero aún espera la aprobación de Provincia para quedarse con los activos de Tecpetrol. La gran ausente fue Capsa, operadora clave en recuperación terciaria, que ahora apunta a explorar la ventana petrolera de Vaca Muerta. Desde Provincia deberían cuidar a uno de sus principales actores sino quieren que otro player mande todo su capital a Neuquén.

Energía Chubut 2050 terminó confirmando la salida de YPF y no dejó ningún anuncio de inversión relevante. Llamó la atención, además, la ausencia de funcionarios estratégicos del sector energético. En cambio, se destacó la presencia de dos dirigentes con aspiraciones electorales.

Como en cada evento del sector, Horacio Marín se robó todas las miradas. Y esta vez, arruinó la fiesta que el Gobierno de Torres había preparado.