Tragedia histórica en Hong Kong: 65 muertos y 250 desaparecidos
El fuego arrasó cuatro torres residenciales del complejo Wang Fuk Court, dejó 65 muertos, decenas de heridos graves y más de 250 desaparecidos.
El horror sacudió a Hong Kong cuando un incendio feroz consumió parte de un gigantesco complejo de torres residenciales en el distrito de Tai Po, dejando 65 muertos y más de 250 personas desaparecidas.
El fuego comenzó el miércoles por la tarde en Wang Fuk Court, una urbanización de ocho torres y 2000 departamentos, una de las áreas más densamente pobladas de la ciudad. Las llamas se iniciaron en los tradicionales andamios de bambú que rodeaban los edificios de 31 pisos, en plena renovación.
La magnitud del incendio fue inédita. El jueves por la tarde todavía se veían llamas en algunas ventanas mientras cientos de bomberos combatían los focos activos y enfriaban las fachadas calcinadas.
Durante una conferencia de prensa, las autoridades actualizaron la cifra de víctimas: 51 personas murieron en el lugar y otras cuatro fallecieron en hospitales. Entre las víctimas fatales hay un bombero de 37 años, que fue hallado con quemaduras tras perder contacto con su equipo.
Aún quedan 62 personas atrapadas, según publicó el South China Morning Post, y 76 hospitalizadas, 15 en estado crítico. Veintiocho pacientes fueron catalogados como casos graves.
Los bomberos confirmaron que el incendio fue extinguido en cuatro torres, mientras que otras tres están "bajo control".
Desesperación y solidaridad
El desastre movilizó a toda la ciudad. Voluntarios improvisaron puestos de asistencia para evacuar, hidratar y abrigar a los afectados. Varios residentes denunciaron que no sonó ninguna alarma de incendio. Muchos debieron alertar a sus vecinos puerta por puerta.
Tres detenidos
La investigación inicial reveló que poliestireno altamente inflamable cubría las ventanas de los ascensores en todos los pisos, facilitando la propagación del fuego. Además, las mallas y lonas exteriores no cumplían con normas de seguridad contra incendios.
El organismo anticorrupción abrió una investigación sobre las renovaciones del complejo. La policía detuvo a tres hombres -dos directores y un consultor de la empresa contratista- por homicidio.
El jefe ejecutivo John Lee anunció inspecciones inmediatas en todas las obras de la ciudad para evitar nuevas tragedias.





