Denuncia contra el laboratorio HLB Pharma: "Era como fabricar fentanilo en una carnicería"
Un extrabajador de la planta Laboratorios Ramallo S.A., vinculada a HLB Pharma, rompió el silencio y describió un escenario de negligencia, precariedad y ausencia total de controles en la elaboración de medicamentos.
"Nadie sabía qué estaba haciendo. Era como fabricar fentanilo en una carnicería", relató P.D., que trabajó allí durante casi cinco años.
La denuncia cobra peso en medio de la investigación por los lotes contaminados que ya provocaron cerca de 100 muertes en el país.
El extrabajador aseguró que la planta operaba bajo la consigna de "hacer más plata, a cualquier costo". Contó que cobraba $450.000 mensuales por un empleo de alto riesgo, sin contar con formación en química o microbiología, y que debió costear de su bolsillo válvulas y mangueras para la caldera por miedo a un accidente fatal.
"La caldera era como un lavarropas gigante que podía explotar en cualquier momento. No tenía permisos ni normas de seguridad", señaló.
Lotes truchos y medicamentos duplicados
Según su relato, los empleados fabricaban lotes gemelos: uno oficial y otro trucho, sin registro ni trazabilidad. "Todo era para vender más, para ganar plata, sin registrar nada. Nadie sabía dónde iban a parar esos medicamentos", denunció.
Condiciones deplorables
El testimonio también reveló la precariedad laboral:
Trabajaban en ropa interior por el calor extremo.
Usaban agua de canilla sin tratamiento.
Los sueros presentaban partículas de vidrio, plástico y óxido.
No existían inspecciones reales de la ANMAT: "Siempre nos decían que iban a venir, que nos preparemos, pero jamás vi a nadie".
300 empleados en la calle
Tras la clausura de la planta, los más de 300 trabajadores quedaron sin empleo ni aportes. Aunque figuraban "en blanco", descubrieron que la empresa no había hecho contribuciones a la ANSES.
"Perdí años de aportes, años de mi vida. Era todo trucho, casi como una esclavitud. Ahora no tenemos trabajo ni quien nos defienda", dijo P.D.
El denunciante, además de lamentar su situación laboral, expresó dolor por las víctimas: "Te duele saber que cualquier paciente se está muriendo por algo que se fabricó ahí adentro. Esto va a seguir matando gente y los responsables siguen libres. No quiero cobrar nada, solo quiero que paguen por lo que hicieron".







