Pablo Grillo, el fotógrafo herido en la marcha, deberá ser operado nuevamente por complicaciones
El joven permanece internado en terapia intensiva en el Hospital Ramos Mejía tras haber sufrido un grave impacto de gas lacrimógeno. Ahora, una hidrocefalia derivada del traumatismo lo obliga a una nueva cirugía.
Pablo Grillo, fotógrafo que resultó gravemente herido el pasado 12 de marzo durante una protesta que reunió a barras bravas y jubilados, sigue en recuperación en el Hospital Ramos Mejía. Tras más de dos meses internado y una mejoría parcial que incluyó un emotivo paseo por el hospital, la familia anunció que Grillo será sometido a una nueva operación. La intervención se debe a un cuadro de hidrocefalia identificado tras controlar las fístulas por las que perdía líquido cefalorraquídeo.
El accidente ocurrió en medio de disturbios violentos cuando una cápsula de gas lacrimógeno impactó en la cabeza del reportero gráfico, dejándolo en estado crítico. Desde entonces, Grillo ha recibido apoyo masivo y la causa judicial continúa abierta para determinar responsabilidades.
Su padre, Fabián Grillo, destacó la fuerza y la evolución del fotógrafo, mientras el equipo médico prepara la cirugía para tratar las complicaciones que surgieron en las últimas semanas. La familia pide oraciones y energías positivas para esta nueva etapa en la recuperación.







