Prisión perpetua para la enfermera que mató a cinco bebés en el Neonatal de Córdoba
Brenda Agüero fue condenada por homicidio calificado y tentativa de homicidio de otros ocho recién nacidos.
Luego de un juicio que conmovió a Córdoba y al país, la enfermera Brenda Agüero fue condenada a prisión perpetua por la muerte de cinco bebés en el Hospital Materno Neonatal Dr. Ramón Carrillo, y por el intento de homicidio de otros ocho recién nacidos entre marzo y junio de 2022. La sentencia fue dictada por la Cámara Séptima del Crimen y un jurado popular, tras más de diez horas de audiencia.
La investigación judicial reveló un patrón de hechos trágicos que inicialmente fueron tratados como negligencia, pero que luego, mediante autopsias y pericias, demostraron ser producto de acciones deliberadas. Solo Agüero estuvo presente en todos los casos, según concluyeron los expertos de la Policía Judicial.
Además de Agüero, fueron condenados cinco exfuncionarios del hospital por encubrimiento, omisión de deberes y falsedad ideológica. La exdirectora Liliana Asís y la exjefa de neonatología, Martha Gómez Flores, recibieron penas de cinco años de prisión. Otros exfuncionarios fueron sentenciados con prisión en suspenso e inhabilitación para ocupar cargos públicos.
El exministro de Salud de Córdoba, Diego Cardozo, fue absuelto junto a otras cuatro autoridades, por no haberse acreditado su responsabilidad directa en los hechos.
Las familias de las víctimas siguieron el juicio con dolor y esperanza. "Nosotros deberíamos estar con nuestros hijos hoy, no con esta tristeza, con estos sentimientos tan devastadores. Pero nos tocó esto y el amor por nuestros hijos nos lleva a seguir luchando por la justicia que ellos merecen", expresó Carolina, mamá de uno de los bebés fallecidos. Otra madre, Yoselín, pidió que esto "no vuelva a pasar con otras criaturas" y reclamó un cambio profundo en el sistema de salud.
El abogado Carlos Nayi, representante de varias familias, calificó el día del veredicto como "histórico". Su colega Daniela Morales Leanza, que representa a los sobrevivientes, aseguró que las pruebas fueron contundentes y que confían plenamente en la sentencia condenatoria.