Un comerciante desesperado tiene que cerrar por la inflación: "Me rindo"

Sergio, un emprendedor que ha luchado incansablemente por mantener su negocio a flote, se encuentra ahora en el punto de quiebre. Después de siete meses de esfuerzo y dedicación, la inflación ha acabado con sus sueños.

 Con un corazón pesado y una voz quebrada por la desesperación, Sergio comparte su historia con una sinceridad conmovedora.

"La inflación es el cuco de los negocios hoy en día", admite Sergio con resignación. "La verdad es que yo, personalmente, me rindo. No puedo con la inflación, así que estoy un poco mal porque voy a terminar cerrando el negocio esta semana. No puedo más. La inflación me comió la ganancia, me comió el capital. Como ven, el almacén está vacío. Es insostenible".

  "¿Qué más puedo hacer para salir adelante?", se pregunta con angustia.  

Con lágrimas en los ojos y un nudo en la garganta, Sergio describe el agotamiento físico y emocional. "Soy un peleador nato, pero no llego. Es una pena, un país tan hermoso como este y tenemos que pasar por estas cosas".