El Padre confesó haber provocado el incendio con su hijo dentro: estaba alucinando

Federico Cosetich, de 39 años, confesó haber iniciado el fuego que terminó con la vida de su hijo, Nazareno Jara, de 19 años, en su domicilio en el barrio Cumelén de la capital neuquina. El hecho, que tuvo lugar hace casi una semana, ha dejado consternación y conmoción en la región.

Según las autoridades, el trágico suceso tuvo origen en un violento altercado entre Cosetich y su hijo, precedido por un conflicto previo donde el padre agredió a su hija y le causó quemaduras en el rostro. Posteriormente, el enfrentamiento entre padre e hijo desembocó en un fatal desenlace, con el padre iniciando el incendio que terminó con la vida de Nazareno.

La fiscal del caso, Lucrecia Sola, ha señalado que el incidente se enmarca en un contexto de violencia de género, donde la víctima se encontraba en una situación de vulnerabilidad debido a problemas de consumo de drogas y violencia física y psicológica por parte de su progenitor.

Relatan que Cosetich, preso de alucinaciones y paranoia, inició el fuego convencido de que había sicarios que lo perseguían y que se encontraban dentro de la vivienda. Este relato ha puesto de manifiesto la compleja situación familiar y personal que llevó a esta tragedia.

El padre, después de provocar el incendio, se mantuvo sentado frente a la vivienda, observando cómo las llamas consumían la casa. Posteriormente, se entregó a las autoridades y confesó su culpabilidad en el hecho. La Justicia de Neuquén lo ha imputado por homicidio doblemente agravado y otros cargos relacionados con violencia de género y lesiones.

La comunidad gitana de Neuquén, a la que pertenece Cosetich, se encuentra consternada por este suceso, mientras que los investigadores continúan trabajando para esclarecer los detalles del caso. Mientras tanto, la hermana de Nazareno recibe asistencia del Servicio de Atención a Víctimas y Testigos (SAVyT) de la fiscalía.