Obligaba a mujeres a prostituirse a cambio de drogas y tatuaba sus iniciales en sus partes íntimas

Un hombre de 42 años fue detenido en el complejo habitacional Soip, en las afueras de Mar del Plata, acusado de liderar una red de explotación sexual de mujeres en situación de vulnerabilidad. La investigación, iniciada a partir de una denuncia anónima, reveló una escalofriante historia de control y violencia, donde las víctimas eran obligadas a prostituirse a cambio de drogas y dinero, que luego el acusado se apropiaba. Una mujer de 23 años fue rescatada durante el operativo policial.

La investigación comenzó tras un llamado al 911 que alertó a las autoridades sobre un hombre que mantenía a varias mujeres retenidas para la prostitución en un departamento del barrio. Tras un mes y medio de tareas de campo, se pudo determinar que el acusado, un hombre con antecedentes penales, vivía en dos departamentos interconectados desde donde controlaba a las víctimas, detalló el diario La Capital.

Según la pesquisa, el detenido cobraba alrededor de 90.000 pesos por cada "pase", pero las víctimas nunca recibían ese dinero. A cambio, les proveía drogas y un lugar para vivir, aprovechándose de sus adicciones y su situación de extrema vulnerabilidad. Una de las víctimas rescatadas, de 23 años, relató el calvario que vivió y confesó que el acusado la había tatuado con sus iniciales en sus partes íntimas.

Los investigadores reunieron pruebas contundentes, incluyendo seguimientos y escuchas que confirmaron los movimientos del acusado y la dinámica de la explotación. Se observó que una luz roja encendida en uno de los departamentos indicaba que había una mujer disponible para un "servicio". Durante el allanamiento, las autoridades confiscaron la camioneta del detenido y una máquina de tatuajes, que habría sido utilizada para "marcar" a las víctimas.

El hombre, imputado por "explotación de la prostitución ajena", se encuentra a la espera de declarar ante la fiscal. La causa podría agravarse por el uso de violencia, lo que aumentaría la pena. Las autoridades continúan buscando a las otras víctimas que se cree fueron explotadas por el detenido.