Exploración

Río Negro avanza con exploraciones de uranio cerca de Catriel

La Secretaría de Minería provincial confirmó el inicio de estudios preliminares en la zona de Tres Nidos.

Joaquin Saldaña

La provincia de Río Negro confirmó que en el segundo semestre de 2025 comenzarán las primeras perforaciones en un nuevo proyecto de exploración de uranio ubicado al noroeste de la ciudad de Catriel, en el área petrolera conocida como Tres Nidos. La iniciativa forma parte de una serie de estudios realizados por la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA), que identificaron potenciales yacimientos en la Cuenca Neuquina.

El llamado "Proyecto Catriel" se encuentra en una fase temprana, pero ya cuenta con antecedentes: en 2009, la CNEA solicitó cinco permisos de exploración que derivaron en los registros conocidos como "Mari" y "Eugenio II". Ahora, el objetivo es ejecutar ocho perforaciones testigo que sumarán un total de 1.500 metros, entre julio y diciembre de este año, para evaluar la viabilidad técnica y definir futuras inversiones.

Desde la Secretaría de Minería rionegrina destacaron que este es uno de los 54 proyectos activos en la provincia vinculados a minerales metalíferos y energéticos con potencial de desarrollo.

Como parte del relevamiento en territorio, el equipo de Relaciones Institucionales y Comunitarias del área minera mantuvo reuniones con superficiarios del área involucrada. Las conversaciones se enmarcan en la Declaración Jurada de Buenas Prácticas, una política que busca fomentar la transparencia, el respeto por el ambiente y el contacto directo con las comunidades locales.

A la par del Proyecto Catriel, el desarrollo más avanzado en materia de uranio en Río Negro es el denominado "Amarillo Grande", operado por Ivana Minerales S.A., una sociedad entre Blue Sky Uranium y Corporación América. Su principal activo es el yacimiento Ivana, considerado el mayor depósito de uranio-vanadio del país, con una proyección de 28 millones de toneladas de mineral.

Este año comenzarán allí perforaciones clave para certificar reservas comerciales y explorar nuevos sectores, con una inversión de 6 millones de dólares. La empresa estima una vida útil de producción de 11 años, con un volumen anual estimado de 1,5 millones de libras de uranio, y la posibilidad de sumar créditos adicionales por vanadio.

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