Zelensky denuncia un plan ruso para dejar a Ucrania sin salida al mar y bloquear el suministro de alimentos

La guerra en Ucrania ha entrado en una fase de máxima tensión sobre el control logístico del Mar Negro. El presidente Volodímir Zelensky denunció este sábado que las fuerzas rusas han redoblado sus ataques aéreos con un objetivo estratégico claro: asfixiar económicamente al país mediante el bloqueo total de sus regiones costeras y la destrucción de infraestructura clave.

"Buscan restringir el acceso de Ucrania al mar. El objetivo del Kremlin es sembrar el caos y ejercer una presión moral insoportable durante el invierno, dejando a la población sin combustible ni suministros de alimentos", sentenció el mandatario.

Tragedia en el puerto de Pivdennyi

La ofensiva rusa ya ha mostrado consecuencias devastadoras en el sur. El viceprimer ministro, Oleksiy Kuleba, confirmó un ataque de gran escala contra el puerto de Pivdennyi, donde los misiles impactaron en tanques de almacenamiento de la firma Allseeds. El bombardeo provocó incendios masivos en depósitos de aceite de girasol y se cobró la vida de un trabajador.

Este incidente se suma a una jornada sangrienta en la misma zona portuaria, donde otro bombardeo previo había dejado un saldo de ocho fallecidos, evidenciando la vulnerabilidad de los centros logísticos vitales para la subsistencia de los civiles.

Guerra de flotas y represalias

Desde Moscú, el Kremlin ha justificado estas acciones bajo la premisa de que la infraestructura económica ucraniana constituye un "objetivo militar legítimo". Sin embargo, analistas internacionales coinciden en que la escalada rusa es una respuesta directa a las recientes operaciones de la Marina ucraniana contra submarinos enemigos y la denominada "flota en la sombra" de petroleros rusos.

Resistencia en la costa sur

Pese al asedio, las fuerzas navales ucranianas mantienen la contraofensiva en las profundidades del Mar Negro, intentando romper el cerco que amenaza con aislar al país del comercio global. Para Kiev, los ataques rusos representan una violación flagrante de las normas internacionales, al apuntar directamente a recursos básicos para la supervivencia humana en las puertas de la temporada más fría del año.