Milei firmará un aumento salarial para el y sus funcionarios tras dos años de congelamiento

El presidente Javier Milei firmará un aumento salarial para los funcionarios de su gobierno y para sí mismo, luego de dos años de congelamiento en los haberes. La medida se publicará en el Boletín Oficial en las primeras horas del viernes 2, cuando se retome la actividad administrativa tras el feriado de fin de año.

Se trata del primer incremento salarial desde que Milei asumió la presidencia en diciembre de 2023. La decisión responde a un reclamo sostenido de secretarios y directores de distintas áreas, cuyos sueldos quedaron fuertemente desactualizados frente a la inflación acumulada en los últimos dos años.

En el oficialismo reconocen que la pérdida del poder adquisitivo ronda el 60% y que esta situación generó dificultades para retener funcionarios y sumar nuevos cuadros técnicos, considerando la competencia con el sector privado. "En el sector privado son mejores sueldos y no tienen la presión de la función pública y las responsabilidades que eso genera", señalaron desde el Gobierno.

El porcentaje exacto del aumento aún no fue precisado, aunque se prevé que esté alineado con las paritarias de los empleados públicos nucleados en el Sistema Nacional de Empleo Público (SINEP), negociadas por el gremio UPCN. Dichos acuerdos registraron un incremento acumulado del 9,68% entre junio y fin de año, aunque fuentes oficiales advierten que, aun con la suba, los salarios seguirían "un 30% por debajo de la inflación".

Actualmente, el Presidente percibe $4.066.018, la vicepresidenta $3.764.820, los ministros $3.584.006, los secretarios de Estado $3.282.709 y los subsecretarios $2.981.510. En la Casa Rosada comparan estos montos con los del Poder Legislativo, donde los senadores nacionales perciben salarios brutos cercanos a los $9,5 millones y los diputados alrededor de $7 millones.

Desde el inicio de su gestión, Milei sostuvo que los funcionarios debían acompañar el ajuste aplicado a la sociedad y rechazó aumentos salariales para el gabinete. Sin embargo, el escenario cambió ante el prolongado atraso de los haberes y la necesidad de reconocer el trabajo realizado por los equipos de gestión, aunque el incremento sea inferior a la inflación.

El reclamo interno llevaba varios meses, pero su concreción se había postergado por el contexto electoral y por la prioridad de otros ajustes dentro del Estado. Finalmente, el aumento comenzará a regir a partir del próximo mes.